Todo el año estuve hablando de que me quería ir de Working Holiday a Nueva Zelanda, que se me había pasado la oportunidad el año anterior y que éste era mi año. Después, con las cosas un poco mas claras, planeé ir primero a Nueva Zelanda un año, después al Sudeste asiático un año, y por último a Australia un año. Estaba todo bastante decidido, bastante digerido, bastante cerrado; hasta que a último momento hubo cambio de planes viajeros.
Surgió una oportunidad de emprender un proyecto muy interesante, muy desafiante, muy loco, entretenido, aventurero, etc., etc. que me obliga a quedarme por un tiempo más en Buenos Aires. Una propuesta que despertó mi curiosidad y que no pude dejar pasar.
Los viajes largos y locos se pospusieron, pero con justa causa. Veremos como sale esta montaña rusa de «quilombo» en la que me embarqué.
Si bien la ciudad no cambió, el estilo de vida sí.
Hace unos días se cumplió un año desde que me mudé a Buenos Aires. Es increíble lo rápido que pasa el tiempo, aunque si miro en retrospectiva, muchas cosas interesantes pasaron.
Muchas actividades interesantes, muchos cambios (de todo tipo), que trataré de resumir en lo siguientes puntos (un poco a modo de balance del estilo de los que hace la gente a fin de año):
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- Empecé viviendo en Córdoba con mi familia en una casa, me mudé a Buenos Aires a un departamento con una «familia postiza» y algunos extranjeros que van rotando, y al final sigo ahí.
- Pasé de ser un joven profesional recién recibido y desempleado; a casi poner un bar gay en Córdoba (casi me olvido de esta locura); a trabajar para una consultora multinacional formal, seria y burocrática; y ahora me sumé a una startup de e-commerce (Linio) que viene a desembarcar en Argentina.
- Pasé de ir en auto a todos lados en 15 minutos sin tanto tráfico, a tener que tomarme el colectivo o subte casi dos horas al día, a caminar 13 cuadras para ir a trabajar.
- De vestirme como un «croto» todo el día porque vendía mi ropa para tener algo de plata, a vestirme formal todos los días, a usar ropa más informal para trabajar.
- De no darle ni bola al blog, a escribir bastante más (aunque siempre me gustaría darle más tiempo), a pasar a ser parte de la Red Viajar e ir al mi primer congreso de bloggers de viajes.
- Conocí mucha gente muy interesante, muchos que me gustaría mantener como amigos en el futuro, otros que quedarán como conocidos, otros que quedarán en historias y anécdotas, y otros que no recordaré en el futuro, lamentablemente.
- Viví (sumados los dueños del departamento) con una colombiana, después un francés, una brasilera, una estadounidense y ahora una rusa.
- Empecé de novio, cortamos, y terminé soltero.
- Pasé de no ir casi nunca a un recital, a ver a Jack Johnson y Michael Bublé (dos de mis artistas preferidos), y a los espectáculos de Fuerza Bruta, La Bomba del Tiempo y Signum.
- Fui a ver mis primeros dos conciertos de música clásica (uno en el mítico Teatro Colón y otro al aire libre).
- Fui a mi primera fiesta de fin de año corporativa.
- Pasé de tener Osde, a Swiss Medical, a Osde nuevamente.
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Balance de viajes y estadías
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- Tuve un sólo viaje al exterior en el que visité 3 países (Chile, Colombia y Ecuador), los dos últimos por primera vez en mi vida.
- En todo el año me alojé en 3 hostels y en 10 hoteles.
- Viajé a Córdoba alrededor de 20 veces, en dos oportunidades me escapé unos días a La Cumbrecita.
- Recorrí mucho Buenos Aires como turista, más que nada los primeros meses. Aunque me quedan muchísimas cosas por hacer (es increíble la cantidad y variedad de ofertas culturales que tiene esta gran ciudad).
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En fin, planeé mil viajes, ayudé a planear muchos viajes, pero terminé viajando muy poco. Fue un año entretenido, movido, de cambios.
Un año que no voy a olvidar y que sentó las bases para el año que se viene, que seguro será aún mejor. Más trabajo, más blog, más viajes, más gente interesante, más experiencias inolvidables.
Salud!
Alfredo E. Ortiz dice
Me dejaste intrigado con el nuevo proyecto que te obligó a los cambios de planes viajeros.
Seguiré pendiente de tu relato. Salud.
Francisco Ortiz dice
El desafío nuevo es formar parte del equipo de lanzamiento de Linio en Argentina! La semana que viene ya van a poder entrar a comprar cosas en el sitio.
Saludos!
flavia dice
por lo visto, se te abre un camino lleno de calles anchas que atravesarán inimaginadas aventuras quizá también viajeras.
Francisco Ortiz dice
jaja siempre muy poética y reflexiva, ojalá, eso es lo lindo, anything can happen!
Ale Pardo dice
En pocos días también se cumple mi primer año en Buenos Aires y me siento bastante identificado con todas las etapas que fuiste pasando, a pesar de algún que otro detalle, pasamos por lo mismo.
En mi caso, yo no viaje en todo el 2014 más que una vez a San Luis y una vez a Córdoba, los dos viajes a visitar a la familia. Parte de este ‘encierro’ en capital es porque hace ya varios meses decidí viajar al sudeste asiático (Tailandia, Vietnam, Camboya y Malasia en el itinerario) por un mes y, para conseguir tantos días de vacaciones, me ‘sacrifique’ trabajando todos los feriados del año. Hoy ya tengo esa ansiedad viajera de que restan solo 60 días para ir en búsqueda de esa nueva aventura que tanto llevo planificando.
Saludos Fran, siempre un gusto leer que seguís adelante buscando cumplir tus objetivos/sueños. Abrazo!
Francisco Ortiz dice
Ale! Nooo que buen viaje!! El sudeste sin dudas está en mi lista. Me muero de la curiosidad por explorar lugares y culturas tan distintas de la nuestra.
Totalmente de acuerdo con lo otro, la vida acá en Buenos Aires es distinta. La gente vive a otro ritmo, siempre alterada, corriendo, estresada, agresiva. No es mi estilo, personalmente me parece una locura, pero tengo claro que es temporal… Ya vendrán buenos viajes y esperemos que bien largos, de esos lentos en los que podés parar a disfrutar del camino, al menos ese es el plan.
Muchas suerte y saludos viajeros!